Redacción.-
El matador de toros sevillano Salvador Cortés ha decidido romper con su apoderado, el taurino Pedro Rossell, que ha sido su representante junto a Alejandro Enríquez durante la temporada 2010. La ruptura se ha producido tras una conversación entre ambos, en la que las partes han consensuado la ruptura, de forma que el torero de Mairena del Aljarafe tendrá que elegir a un nuevo representante para la próxima temporada taurina de 2011.
Salvador Cortés ha cerrado la temporada con 20 corridas de toros, sin llegar a alcanzar las 25 corridas que se firmó como mínimo con el apoderado a principios de año. Cortés no está teniendo buena suerte con sus apoderados, ya que sigue sin encontrar la persona que le permita cierta estabilidad en su dirección y sepa aprovechar los importantes triunfos en plazas de relevancia. Esta pasada temporada ha cortado tres orejas en la Maestranza, por ejemplo. En años anteriores ha sido dirigido por Taurotoro (José María González de Caldas), José Jesús Sánchez ‘Hipólito’ y Pedro Rossell. Durante los últimos años ha contado con la colaboración y apoyo en las tareas de entrenamiento y en el campo del taurino sevillano Melquiades Garrido.