El banderillero sevillano ha recibido durante la pasada noche nuevas transfusiones de sangre. una noche en la que ha estado con muchas molestias y vómitos. Tras hablar con la familia sobre la situación actual, se ha consensuado una nueva intervención para colocar drenajes de mayor tamaño. Persiste el pronóstico de muy grave.
Redacción.-
El banderillero sevillano Luis Mariscal ha vuelto a entrar en el quirófano esta misma mañana de martes. La operación busca limpiarle el edema y colocarle nuevos drenajes, de mayor tamaño, que ayuden a que la sangre circule mejor en el circuito de retorno. La decisión ha sido adoptada después de ser sometido a la revisión médica matinal y que el equipo médico se reuniese con los familiares del torero informándoles sobre su estado y sobre la necesidad de entrar de nuevo al quirófano. Durante la noche ha recibido nuevas transfusiones de sangre, algo normal dentro del cuadro de gravedad que presentan las heridas. El objetivo más importante a conseguir es que no aparezca ninguna infección
A pesar de la leve mejoría que experimentó durante la tarde de ayer, su estado continúa siendo muy grave. La pasada noche, a pesar de no haber fiebre, la ha pasado mal, con dolores y vómitos.
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