Daniel Soto, de la Escuela de Tauromaquia de La Algaba, y Antonio García ‘El Nieto’, de la Escuela de Tauromaquia de Sevilla, son los dos sevillanos que compiten esta noche con otros cuatro aspirantes en la segunda novillada del ciclo de promoción en la Real Maestranza de Sevilla.
Carlos Moya.-
Esta noche se presentan por primera vez como novilleros sin picadores, en la plaza de toros de la Maestranza, dos sevillanos, alumnos de escuelas locales. Se trata de Daniel Soto (Escuela Taurina de La Algaba) y de Antonio García ‘El Nieto’ (Escuela Tauromaquia de Sevilla).
El primero de ellos, Daniel Soto, de 17 años, lleva alrededor de cuatro años en la escuela algabeña, y desde hace dos temporadas es novillero sin caballos. «Me encuentro muy contento, y con la idea de no dejarme nada en el tintero. Voy a intentar dar todo de mí y no defraudar, porque quiero sacar algo positivo», comenta ilusionado a SEVILLA TAURINA horas antes del paseíllo. En cuanto a los erales de Pallarés que se lidiarán esta noche, Soto ha manifestado a este portal que «los he visto por fotos y vienen muy bien presentados. Creo que deben dar buen juego». Su toreo se acerca a un concepto artístico. «Me fijo mucho en Morante de La Puebla y en Sebastián Castella. También me quedo con la técnica de El Juli. De todos me gusta coger algo para incluirlo en mi tauromaquia, que se acerca mucho al toreo de arte».
Por tradición familiar, Daniel Soto ya formaba parte de la Escuela Taurina privada que hubo en La Algaba hace tiempo, y un año más tarde se puso por primera vez delante de una becerra. «De siempre me ha gustado el mundo del toro. De chico acompañaba a mi primo a la escuela. Me llamó tanto la atención que me apunté para aprender, y con seis años toreé una becerra en mi pueblo». La temporada pasada lidió 6 novilladas y cortó 4 orejas.
Por su parte, Antonio García ‘El Nieto’ lleva desde los ocho años en la Escuela Taurina de Sevilla, y dos como novillero sin picadores. Este portal no ha podido contactar con el joven diestro, de 17 años –estaba velando armas a primera hora de la tarde en su hotel–, pero sí con su abuelo Juan Antonio García, fotógrafo taurino y por quien lleva el apodo. Según García, «mi nieto hace un toreo clásico sevillano. Le gusta mucho Morante de La Puebla y Manolo Vázquez. Su tauromaquia es muy de los Vázquez». El año pasado cortó 10 orejas en los 11 festejos que lidió. Este año, con dos orejas cortadas en la fase previa, se ha quedado a las puertas de las semifinales del XVI Ciclo de novilladas de promoción organizado por la Asociación de las Escuelas Andaluzas. Aun así, la organización lo mantiene de suplente para las semifinales, que celebrará este fin de semana la tercera de las cuatro semifinales de la edición de este año.
