ENTREVISTA a Miguel Ángel Delgado: «Torear en la Maestranza siempre añade una presión extra»

Francisco Mateos.-

     El novillero Miguel Ángel Delgado debutará en la Real Maestranza este domingo como novillero con picadores. Miguel Ángel, de 18 años, debutó con los del castoreño a finales del año pasado, en septiembre, en la Feria de Écija, su pueblo, tras ser uno de los novilleros sin caballos que mayor número de premios ha acaparado pese a su juventud. Hecho en la Escuela de Tauromaquia de Écija, bajo la dirección de su director, el matador de toros Pepe Luis Vargas, Miguel Ángel fue proclamado 'Triunfador' de la competición de todas las Escuelas de Andalucía. Además, toreó en las novilladas de promoción del mes de julio de Sevilla el año pasado, dando una vuelta al ruedo en su novillada y dejando una gran impresión, lo que le valió pasar a la final. En esta final fue el claro 'Triunfador' tras cortar dos orejas, ganando el vestido de luces que concede la Real Maestranza.

     Al ser declarado 'Triunfador' de las novilladas sin caballos el año pasado, la empresa de Sevilla le guardó un puesto para las novilladas de mayo y junio de este año. Sin embargo, al final no vino en esta fecha y viene en septiembre, más rodado. ¿Va a ser muy distinto el novillero que veamos este domingo al que hubiera venido en mayo?
 
    Pues está claro quer sí, ha sido una

Jugando los brazos a la verónica clásica. FOTO: Javier Martinez.

decisión muy acertada la que tomamos. No es fácil dejar una fecha de Sevilla porque a los toreros nos encanta torear, pero en el toreo se hacen siempre las cosas despacio, sin prisas. Si hubiéramos venido en mayo sólo habría toreado unas cinco novilladas; en cambio, ahora en septiembre ya vengo con un rodaje de 25 novilladas. Eso significa más experiencia y mayor técnica. Se viene mucho más tranquilo.
 
    ¿Cómo ha sido la temporada?
 
    Muy interesante. Siempre ha ido de menos a más. Ahora recuerdo mis primeras actuaciones este año y las de los últimos días, como el reciente triunfo en Los Molinos por ejemplo, y no tiene nada que ver el toreo de principio de temporada que el de final. Estoy mucho más cuajado, más suelto, más seguro. El rodaje es muy necesario, y más en un torero tan joven como yo.
 
    A pesar de ser hijo de torero, practicamente tu padre ni te ha visto torear…
 
    Pues es verdad. Mi padre es Pablo Delgado, que va en la cuadrilla de Sebastián Castella. Ha tenido una temporada muy intensa de paseíllos y apenas nos hemos visto, porque él estaba toreando y yo también. Como curiosidad te puedo decir que tras la cornada que sufrí el 11 de agosto en El Castillo de las Guardas (Sevilla), no me pudo ver personalmente hasta septiembre, porque toreaba a

Torerísimo muletazo el día de la cornada en El Castillo. FOTO: Javier Martínez.

diario. Incluso estaba complicado que me pudiera ver este domingo en Sevilla, porque toreaba con Castella. Estaba buscando combinaciones de vuelos para intentar estar. Ahora, con el corte de temporada por la anemia de Castella, sí podrá verme con tranquilidad.
 
    En este caso, la labor que ha realizado Tomás Campuzano dentro del equipo que le apodera, la empresa Toreromaquia, habrá sido muy importante…
 
    Sí, el maestro me ha ayudado mucho a mejorar en cuestiones técnicas. Después, su presencia en el callejón me ha servido para inspirarme confianza e irme dando consejos técnicos en cada momento sobre mis actuaciones.
 
    El cartel de este domingo no puede ser más bonito: en Sevilla y con los otros dos novilleros más interesantes de la provincia, Oliva Soto y Pepe Moral…
 
    Creo que es un cartel muy interesante para Sevilla y para cualquier plaza. De hecho, hemos coincidido los tres en otras plazas. Pero hacerlo en Sevilla es muy bonito e interesante para el aficionado y para nosotros, porque esa rivalidad existe. Ninguno vamos a dejarnos ganar la pelea.
 
    Qué le mete más presión: ¿torear en Sevilla o torear con ellos dos?
 
    Torear con ellos quizás no tanto, porque hemos toreado los tres este año afortunadamente y hemos coincidido varias veces. La presión la mete Sevilla. Torear en la Maestranza siempre añade una presión extra al de cualquier paseíllo.