El pasado jueves quedó inaugurada en las instalaciones de la Cava Domecq de Aguascalientes (México) la exposición fotográfica taurina de la familia Arjona. El alcalde Gabriel Arellano fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a la exposición con la presencia del más joven de la dinastía de fotógrafos de esta familia sevillaba, Joaquín Arjona, a quien Arellano dio la bienvenida, además de resaltar las virtudes de tan relevante exponente de esta especialidad.
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Iván López.- Hablar de Arjona es hablar de fotografía taurina. Tres generaciones de fotógrafos sevillanos que durante más de medio siglo documentan con las mejores imágenes el espectáculo más verdadero que existe, los toros. Desde que en la década de los cincuenta Pepe Arjona cambiara estoque y muleta por la cámara y la película sensible, trebejos con los que fue capaz de hacer de un oficio todo un arte, consiguiendo que el nombre de Arjona se convirtiese en un sello, un símbolo y una firma que es sinónimo de la mayor calidad. Hoy día, en pleno siglo XXI, su hijo Agustín y su nieto Joaquín siguen encandilando al mundo con sus fotografías taurinas, ya sean de actualidad, artísticas o del campo bravo, donde su sello
es inconfundible. Es precisamente en México donde ahora pueden disfrutar de una muestra exclusiva. El pasado jueves quedó inaugurada en las instalaciones de la Cava Domecq de Aguascalientes (México) la exposición fotográfica taurina de la familia Arjona. El alcalde Gabriel Arellano fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a la exposición con la presencia del más joven de la dinastía de fotógrafos de esta familia, Joaquín Arjona, a quien Arellano dio la bienvenida, además de resaltar las virtudes de tan relevante exponente de esta especialidad. La muestra consta de 22 originales en los que los Arjona muestran, principalmente, el hábitat natural del toro bravo, además de algunas otras de estupendos momentos de los diestros José Tomás y José Antonio 'Morante de la Puebla', así como otros pasajes que suceden en una plaza de toros. Según Joaquín Arjona, “la exposición se centra más que nada en el campo bravo, en el hábitat natural del toro, y en los detalles y curiosidades que ocurren a lo largo de una tarde de toros”. Todas las instantáneas llevan impreso el toque intuitivo, sensible, artístico, detallista, oportuno y hasta periodístico de los Arjona, que se sumergen en esta mágica actividad de capturar para siempre esos momentos que de manera fugaz pasan por el ojo normal, pero no el de sus cámaras fotográficas. Las fotografías pasarán a exponerse en el paseo de Expo Plaza, junto a la plaza de toros monumental de Aguascalientes, para que las puedan contemplar los transeúntes.
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