El hermano de Salvador Cortés, Luis Mariscal, banderillero en su cuadrilla, destaca la raza del torero sevillano para jugarse la vida con un toro de Victorino Martín muy complicado. Apunta que Cortés toreaba bajo la presión propia de querer triunfar y de algunos comentarios sobre que se le iba la Feria en blanco.
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Francisco Mateos.- Sobre las doce de la noche llegaba Luis Mariscal a las puertas del hospital Gálvez de Málaga, acompañado por otros miembros de la cuadrilla. El hermano de Salvador Cortés, también matador de toros aunque ahora banderillero incluido en la cuadrilla de su propio hermano, llegaba tras haberse cambiado de ropa rápidamente en el hotel, ya que había permanecido en la enfermería hasta la conclusión de la operación ras ser cogido en el último toro. Luis Mariscal relataba el momento de la cornada. "Ha tenido un lote imposible. Con su primero hizo un gran esfuerzo, buscándole algo por todos lados y de todas las formas posibles, pero era imposible. En el último salió hasta con más ganas. La cogida vino cuando toreaba sobe la mano izquierda al de Victorino Martín. El toro
era muy complicado, pero Salva tiene mucha raza y no dejó de intentarlo en ningún momento. El toro le tiró un derrote seco y le corneó de forma certera. Yo mismo lo recogí del albero y ya sabía que estaba herido. El susto ha sido tremendo porque se le notaba que tenía un fuerte dolor y los toreros nos asustamos mucho cuando el pitón entra en el abdomen. Es un sitio muy delicado". El banderillero sevillano señala que "Salvador toreaba hoy con mucha presión. Le está costando mucho trabajo sacar frutos y recompensa de sus triunfos. Hoy ha venido a Málaga a jugársela una vez más. Venía presionado por su amor propio y raza de querer triunfar todas las tardes, pero también por algunos comentarios de su primera corrida, el pasado sábado, en la corrida de
Cuvillo, en la que no logró triunfar. Decían que después de dos corridas se le iba la Feria de Málaga en blanco. Se olvida muy rápido que ha sido el 'Triunfador' de la Feria de Málaga en los dos últimos años". Salvador Cortés era trasladado en una ambulancia medicalizada desde la enfermería de la plaza hasta el hospital Gálvez de Málaga sobre las 23:10 horas, quedando ingresado en la UCI de dicho centro hospitalario. A las doce de la noche, el torero aún no había despertado de la anestesia general. A esa hora ya había llegado su madre desde Mairena del Aljarafe, así como su padre, el banderillero fretirado Luis Mariscal. Su hermano, Luis Mariscal, también permanecerá junto al torero estas primeras horas hasta que se observe la evolución de la cornada.
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