El Juli ha recogido en Sevilla un premio del programa ‘Carrusel Taurino’, de Canal Sur. El diestro madrileño, muy tranquilo, seguro y convencido, no ha evitado ni vetado ninguna pregunta a diferencia de los empresarios sevillanos y los maestrantes, volviendo a enviar un claro mensaje a los maestrantes para que empiecen a trabajar en la búsqueda de una solución.
Redacción.-
El diestro madrileño Julián López ‘El Juli’ ha asistido personalmente en la capital sevillana a la entrega del II Premio Taurino del programa ‘Carrusel Taurino’, de Canal Sur radio, que le distingue «por haber realizado una temporada modélica y llevar media vida (15 de sus 30 años) dedicada al mundo de los toros». Tras el acto de entrega, el torero atendió a los medios de comunicación y, a diferencia de los empresarios de la Maestranza Eduardo Canorea y Ramón Valencia, Julián aceptó cualquier tipo de pregunta, sin vetar ningún tema. Lógicamente, las preguntas se centraron sobre su ausencia y la de otras cuatro figuras de la temporada en la Maestranza.
Por las declaraciones de El Juli y su seguridad al realizarlas está claro que la tensión sigue en todo lo alto, que los toreros siguen convencidos de su postura de no torear más en la Maestranza mientras los empresarios sean Canorea y Valencia, y que los maestrantes (más allá de respaldar de forma tácita a los empresarios) no han realizado ningún tipo de movimiento para intentar solucionar la grave crisis que está dañando de forma crítica la imagen de su propia plaza. Es más: ni tan siquiera han respondido aún a los toreros, que le enviaron previamente el comunicado son su decisión.
El Juli ha vuelto a señalar a los maestrantes como los corresponsables de la crítica situación que vive la plaza de toros de Sevilla. «Los toreros que hemos adoptado esta postura esperábamos una actitud de los maestrantes, y no la ha habido. Este problema no implica sólo a los toreros y los empresarios de la plaza, sino también a sus los dueños de la plaza. Desgraciadamente pienso que es perjudicial para todo el mundo y ojalá pronto se busque una solución. Las soluciones están ahí y lo que hay que hacer es ponerse a trabajar, pero no ha habido ningún movimiento. Ahora es cierto que está la Feria de San Sisidro y estamos de lleno en la temporada, pero el interés primero de los toreros es que se arregle porque lo que soñamos es con estar en Sevilla».
Sobre la pobre asistencia de público a la reciente Feria de Abril, El Juli comentaba que «a ningún torero nos gusta noticias negativas sobre la Fiesta. y por encima de nuestras carreras está el bien de toreo. Está claro que esa baja asistencia no es buena para el toreo, pero antes se ha podido soluionar y no se ha hecho, y esperamos que ahora se pueda solucionar».
Ante muchos artículos que le colocan como el ‘cabecilla’ del grupo de figuras que han decidido no volver a torear en la Maestranza mientras los empresarios actuales sigan siendo Canorea y Valencia, El Juli quiso dejar bien claro que «ni es una idea mía ni es un proyecto mío. Somos un conjunto de toreros en el que todos tenemos el mismo peso y la misma responsabilidad. La intención de todos es que se pueda solucionar, que es lo que debe hacerse».
El Juli señalaba que «lo que importa es el bien de la Fiesta y ojalá pronto se solucione todo para que Sevilla vuelva a tener la Feria que merece y los toreros podamos estar en la plaza de nuestros sueños, que es Sevilla».
Quiso enviar un mensaje conjunto de los toreros ausentes de Sevilla (El Juli, Morante, Perera, Talavante y Manzanares). «Los toreros sabemos que estamos perdiendo mucho no toreando en Sevilla. Nosotros queremos a esta afición porque es la más especial y donde más nos gusta torear, y lo que queremos es volver a torear en Sevilla, pero las circunstancias que hemos vivido en Sevilla no pueden consentirse más. Los toreros tenemos la misma idea y hemos tomado la decisión con la misma responsabilidad. A nivel particular, no estoy toreando en plazas en las que entiendo que se me ha faltado el respeto por parte de la empresa organizadora. Sevilla es la plaza más importante y en la que no pueden repetirse cosas que se podrán discutir, pero que sí han pasado en Sevilla. Eso es una realidad».
