Daniel Araujo ha sido proclamado ‘Mejor novillero’ de la matinal benéfica de Utrera, cortándole las dos orejas a un notable novillo del Conde de la Maza, premiado con la vuelta al ruedo y con el trofeo al ‘Novillo más completo’ del festejo. Eloy Hilario y Pablo Aguado también pasearon los dos apéndices de sus respectivos novillos. Diánez, González y Silvera, aplaudidos.
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Manuel Viera.-
Daniel Araujo mostró bien a las claras esta mañana en Utrera la creciente evolución de su clásico concepto del toreo. El utrerano sorprendió ante el noble y buen novillo cuarto del Conde de la Maza con un toreo a la verónica de mano baja con la virtud del ritmo y la despaciosidad. Gustó Araujo en este preámbulo a la faena de muleta en el que, tras una magnifica serie de naturales abrochados con excelsos pases de pechos, ofreció un toreo, a derecha e izquierda, con el que recreó la naturalidad de sus formas en series lentas, ligadas y muy bien rematadas. Finiquitó de media estocada. Un valor en alza que, al final, recibió el trofeo al ‘Mejor novillero’ y, ‘Jardinoso’, el notable eral del Conde de la Maza, fue premiado con la vuelta al ruedo y como ‘Mejor novillo’ de la matinal benéfica,
También Pablo Aguado dejó muestras de sus exquisitas formas, ofreciendo un toreo claro, valiente, muy técnico y de comprobado gusto. Faena discontinua, por las complicaciones del eral de Guardiola, en la que hubo momentos de indudable calidad, sobre todo al natural. Mató de gran estocada.
Eloy Hilario tuvo una enorme actitud y deseos de agradar. Su toreo tuvo el ingrediente del valor y la virtud de transmitir la emoción derivada de las complicaciones de la casta del novillo del Conde de la Maza. Antes había invitado a banderillear a Pablo Aguado, con desigual resultado en los pares del sanluqueño. Mató con solvencia.
Emilio Silvera desarrolló un toreo sin pulir pero en sus formas se adivina su buen concepto. Toreó con gusto al buen sexto de Guardiola, dibujando el natural, con ese punto de belleza que lo llena de expresividad, en una faena en la que le costó encontrar el sitio con la derecha. No mató bien.
Noble aunque soso se comportó el primero de Guardiola. Con él, Israel Diánez se gustó con el capote en buenos lances a la verónica, para realizar después faena templada, con cites de muleta adelantada, con la que demostró valor y ligazón en los muletazos con la diestra. El fallo con los aceros le privó del trofeo.
Muy complicada resultó la lidia del encastado segundo novillo del Conde de la Maza. Fernando González, tras mucho porfiar, le pudo sacar algún que otro natural con el sello de su personal concepto. Con los aceros no estuvo bien.
GALERÍA GRÁFICA (lopezmatito.com) |
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