«…un gesto por su parte en estos inicios de temporada, bonita e ilusionante y conmemorativa, además, de sus quince años de alternativa. Sonrisa maliciosa que le delató sus intenciones. Y lo hará, tal vez, en Sevilla. Con toros de la emblemática ganadería de sus grandes triunfos. El Cid está por el gesto. Y las cosas son como se perciben…»
Manuel Viera.-
Será una Feria distinta la Feria de Abril que no pudo ser. Será difícil y complicada, pero en esa dificultad y problemática ha de radicar precisamente su interés. Así Pagés -no le queda otra- optará por aportaciones positivas para un abono en desbandada. Para un público que, sin el tirón -más popular que emotivo- de las cinco figuras, necesita de nuevas realidades con capacidad para decir verdades. Porque ¿quién tiene la legitimidad de la emoción? Y es que mientras un torero y un toro capten la atención de un espectador mediante la autenticidad que surge del valor hecho arte, seguirá escribiéndose este precioso relato.
Llegado este punto uno se da cuenta de que lo que verdaderamente interesa es que se sigan contando historias al margen de la extraordinaria calidad del toreo de una u otra figura ausente. De reivindicaciones en la plaza del presente y del futuro sin alivios y planteamientos falsos. De sumar, no de restar. De valores a cuidar, no a destronar. Por ello resulta clave el planteamiento ‘agresivo’ de un ciclo que a nadie debe dejar impasible. Uno podrá rebelarse frente a su contenido, pero difícilmente podrá permanecer indiferente.
Así, entre rumores de calle. Entre medias palabras, distancias y secretismos, surgen las noticias que cada cual se inventa a sí mismo Y mientras la empresa opta por el silencio a modo de estrategia algo se vislumbra en esta compleja edición del ‘pase y vean’. El placer de dar con un personaje abierto, sumamente feliz tras recibir el VI Premio Taurino de ABC con el que se le valora la importante lección de pureza con la que enloqueció a la gente una tarde de otoño en Las Ventas de Madrid y, además, le reconoce su trayectoria de torero clásico, me suscitó la pregunta. Sucedió el pasado viernes en el espacio dedicado a los toros en la Linterna de COPE -Utrera 98,1 FM- en el transcurso de la charla que mantuve con él. Al final de la entrevista le pregunté si tal consideración por tan enorme tarde no merecía un gesto por su parte en estos inicios de temporada, bonita e ilusionante y conmemorativa, además, de sus quince años de alternativa. Sonrisa maliciosa que le delató sus intenciones: «Ahora mismo no lo sé. No lo sé. Pero sí que habrá algo distinto. Está en mente. No te lo puedo decir… pero lo tengo en mente. Está en mente hacer algo importante».
Y lo hará, tal vez, en Sevilla. Con toros de la emblemática ganadería de sus grandes triunfos. El Cid está por el gesto. Y las cosas son como se perciben.
*Manuel Viera es redactor y responsable de las crónicas de Sevilla Taurina. (manuelviera.com)
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