Todos los sevillanos que han hecho el paseíllo hoy han cortado orejas. Tres ha conseguido Diego Ventura en su encerrona en el cierre de Huelva. El Cid y Daniel Luque logran un doble trofeo, mientras que Morante y Agustín de Espartinas consiguen una oreja.
Redacción.-
El balance de los toreros sevillanos que han hecho el paseíllo hoy, domingo 5 de agosto, ha sido el siguiente:
CORRIDAS DE TOROS
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Vitoria: Se han lidiado toros de Valdefresno; destacó por buen juego el cuarto. El Cid, oreja y oreja con petición de la segunda tras aviso. César Jiménez, silencio tras leve petición y silencio. Iván Fandiño, oreja y silencio. Un cuarto de plaza.
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Bayona (Francia): Se han lidiado toros de Alcurrucén, manejables; el tercero, premiado con la vuelta al ruedo. Juan José Padilla, ovación y ovación. Juan Bautista, ovación y ovación. Daniel Luque, dos orejas y ovación. Dos tercios de plaza.
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Íscar (Valladolid): Se han lidiado toros de Cebada Gago, manejablesl. Javier Castaño, silencio y dos orejas. Leandro, oreja y silencio. Agustín de Espartinas, oreja y silencio.
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El Puerto de Santa María: Se han lidiado toros de Toros de Juan Pedro Domecq -cuarto y quinto-, Zalduendo -segundo y tercero- y Victoriano del Río -primero y sexto-, nobles, mansos, flojos y descastados. Finito de Córdoba (de negro y azabache), saludos y silencio. Morante de la Puebla (de negro con bordados en hilo blanco), saludos tras dos avisos y oreja. Miguel Ángel Perera (de azul marino y oro), saludos tras aviso y ovación. Tres cuartos de plaza.
Según crónoica de nuestro compañero Manuel Viera sobre la actuación de Morante de la Puebla esta tarde en El Puerto, «tal vez no fue la tarde apoteósica que siempre se espera de él. Ni tuvieron su respectivas faenas la redondez deseada, pero de nuevo se volvió a vivir el misterioso encanto que desprende su toreo cuando encaró de manera admirable el refinamiento y la elegancia propias de sus formas. Morante volvió a hacer y decir el toreo en la plaza donde mejor se degusta, donde mejor le suenan las palmas por bulerías, y lo utilizó para expresar con total transparencia y nitidez la sensibilidad y belleza de de una tauromaquia tan distinta como genial.
Los primeros muletazos apoyado en las tablas al noble y parado, por mal picado, quinto toro de Juan Pedro fueron una sugestiva introducción a un singular pase por bajo y un molinete con firma, el aperitivo a una recreación en la que el toreo a derecha realzó el carácter sublime de cada muletazo. En efecto, el sevillano de La Puebla no sólo impregnó de verdad cada uno de los pases, sino que introdujo los detalles personalísimos que lo definen en un arrebato final donde se notó la autenticidad e intensidad de cada trazo. Y ya se sabe, no hay mayor emoción que la puramente emanada del sentimiento. Faena lograda y reforzada con toreros adornos, para después introducir con habilidad la mitad de la espada.
Faena cambiante, aunque ambiciosa y, sobre todo, larga hasta llegar a cansar, la realizada al soso y rajado segundo de Zalduendo. El acoplamiento fue creciendo, con largas pausas y poca prisa, gracias a su planteamiento técnico, hasta conseguir bellos detalles finales en las que dos soberbios derechazos y dos inauditos naturales pusieron colofón al infinito trasteo. Le avisaron del tiempo transcurrido antes de decidirse a matar, sonando el segundo aviso cuando descabellaba tras el fallar con la espada».
REJONES
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Huelva: Se han lidiado astados, por orden de lidia, de José Luis Pereda, reservón; Fermín Bohórquez, manejable; Partido de Resina, con la cara alta y orientándose; Miura, que se dejó; Benítez Cubero, bueno; y Juan Pedro Domecq, con pies y noble. Diego Ventura, silencio, palmas, silencio, ovación, dos orejas y una oreja. Plaza llena. Ventura fue derribado en el primero, pasando a la enfermería para ser atendido de una fuerte contusión en el hombro izquierdo, del que tuvo que ser infiltrado en dos ocasiones durante el festejo. El caballo ‘Galán’ recibió una cornada de menor importancia. (VER CRÓNICA Y GALERÍA GRÁFICA)
NOVILLADAS SIN PICADORES
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Navas de San Juan (Jaén): Se han lidiado novillos de Jiménez Paquau, de notable juego. Curro Durán, dos orejas y ovación, Carlos Aranda, una oreja, y dos orejas y rabo. Emilio Silvera, una oreja y dos orejas.
