Dos excesivas orejas paseó El Juli tras lidiar al quinto toro de la aburrida tarde, único astadoque atisbó la bravura en la floja y descastada corrida que envió el ganadero Núñez del Cuvillo. Morante de la Puebla fue silenciado y hasta pitado en su segundo por la brevedad. Roca Rey, ovación por voluntarioso.
SEVILLA / Corrida de toros
TOROS: Se han lidiado cinco toros de la ganadería de Núñez del Cuvillo, aceptables de presentación, nobles, descastados y de escasas fuerzas. El cuarto, manso y parado, se lidió como sobrero. Noble, sin fuerzas, el primero. Sosos y blandos segundo y tercero y sexto. Con calidad en su embestidas el quinto.
ESPADAS: –Morante de la Puebla (de coral y oro), silencio y algunos pitos.
–Julián López ‘El Juli’ (de gris plomo y oro), silencio y dos orejas.
–Andrés Roca Rey (de blanco e hilo blanco), silencio y ovación.
CUADRILLAS: Destacó en banderillas Francisco Durán ‘Viruta’.
INCIDENCIAS: Lleno de ‘No hay billetes’. Sonó a mitad del paseíllo el himno nacional y se guardó un minuto de silencio por el matador de toros sevillano, recientemente fallecido, Rafael Chicuelo.
Manuel Viera.-
El pasodoble ‘Maestranza’, hecho con toda seriedad técnica y armónica, es un rango ilustre del arte sonoro que prologa el acontecimiento más esperado y deseado cada Domingo de Resurrección en la plaza de toros de Sevilla. ‘Maestranza’ sonó y dio música y vida a una plaza callada desde el pasado día de la Hispanidad. Desde luego, el punto de encuentro se produjo para que el placer de la música se sintetizara con el placer del toreo. Pero no fue posible.
El comienzo no podía ser más prometedor con ese lancear de Morante, despacio y acompasado, al ‘colorao’ primero. Un espejismo que duró breves instantes en el ilusionado espectador. Porque de inmediato comenzaron a diluirse los deseos para dar paso al desencanto. ‘Farfonillo’, el toro de Núñez del Cuvillo, mostró una nobleza y calidad excelsa a igual nivel que su desesperante falta de fuerza. Un animal sin vida que pasó por la suerte de varas de puro trámite y al que el diestro de la Puebla le trazó muletazos deshilvanados sin una pizca de emoción. Intentos vanos que le hicieron desistir con la inmediatez que le caracteriza. Pinchó y el silencio final fue consecuencia de la frustración.
Peor descontento provocó el cuarto, apuntillado en la plaza tras partirse una pata en los inicios de la lidia. El sobrero, del mismo hierro ganadero, resultó ser un manso parado que ni siquiera los tres puyazos le avivaron su falsa casta. El diestro cigarrero lo mandó al desolladero en un santiamén.
Pocas figuras del toreo han mantenido, e incluso mantiene hoy, una atracción tan persistente para el público como El Juli. Fíjense si es así que, tras lidiar al quinto, el toro destacado de la infame corrida, le pidieron con increíble fuerza las dos orejas que el presidente, contagiado por la muchedumbre, no dudó en conceder. Ver para contar. ¿Estuvo bien El Juli? No lo dudo. Pero no tan magnífico para el honor del elevado premio. Su concepto, de clara voluntad clásica, se reafirmó en un toreo largo, poderoso, a veces desplazado en demasía, capaz de resaltar su habitual nivel técnico que le hace ser un virtuoso de la colocación y la ligazón. Alcanzó momentos estimables con el trazo del natural y ya en el epílogo de faena logró su más alta dimensión con la derecha, hilvanados muletazos de singular atractivo. La estocada, trasera, dio pie a la locura y… a la dos orejas.
Al inválido segundo le sacó todo tipo de pases sin una pizca de emoción. Un pinchazo precedió a la estocada.
El valor es innegable y la actitud intachable. Hoy le faltó toro para demostrar lo primero y sólo pudo mostrar los segundo. Al blando tercero no se le picó. Roca Rey estuvo vibrante con el capote, pero nada pudo hacer con la muleta. Dibujó el natural con seguridad e anduvo igual de dispuesto con la derecha. No hubo más. Con contundente estocada lo tumbó.
El sexto tuvo, como todos, una embestida noble, sosa y cansina, y tampoco le sirvió. Se entregó en el peto en la primera vara y sólo se le señaló la segunda. El diestro peruano quiso y no pudo, y sólo con un cambio de mano y un natural tan lento como profundo consiguió el momento más emotivo de la faena. De estocada lo finiquitó.
AL NATURAL
El cuponazo taurino
Francisco Mateos.-
Ardían las redes sociales taurinas contra la nueva televisión taurina que le ha cogido en gayumbos en el inicio de la temporada. Dicen que tienen 18.000 abonados… Muchos parecen. Pero más son los que están cabreados y que pedirán devoluciones de la cuota cobrada ante la imposibilidad de ver la corrida del Domingo de Resurrección en Sevilla, la corrida del estreno de Mundotoro TV y del estreno de la temporada sevillana. Hasta reconocidos taurinos (como los ganaderos Conde de la Corte, Guadalmena o Luis Algarra, entre otros) mostraban su enfado públicamente en las redes sociales contra el nuevo canal que ha venido a enterrar a Toros TV, que sí tenía ya una plataforma y estructura solvente. Las prisas son malas consejeras; el tiempo dirá en qué queda todo.
Se podrían exponer dichos españoles para retratar el balance de la desesperante corrida inaugural de la temporada; mi compañero Manuel Viera titulaba su crónica de este mismo día, pero en 2022, como ‘La undécima decepción’… pues la de hoy es, por tanto, la duodécima… ‘Erre que erre’, ‘Decíamos ayer…’, ‘El hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra’; dichos populares que retratan -un año más- la desesperación de la corrida más emblemática de la temporada. Porque el error está claro: si no hay toro, no hay nada que sustente la Fiesta. Es imposible. Y la culpa no es sólo del empresario -que la tiene-, sino de todo entramado-negocio taurino que trae toros tan ‘dulces’ que empalagan… y hartan. Desrazados, sin presencia para la fecha y la plaza que es, sin fuerzas, sin fondo… la nada absoluta. No es el fracaso de Cuvillo: es el fracaso de todo el entramado profesional que intenta dirigir a la afición taurina por una vía muerta que sólo conduce al precipicio a medio o corto plazo.
Y uno que medio se equivocó -el quinto-, que se desplazó en la muleta con cierta transmisión, lo aprovechó un Juli, que está sobrado de técnica, y puso todo el empeño del mundo. Buena faena -a pesar de un feo desarme, huyendo del toro sin engaño en la mano- y estocada a su estilo y trasera. Y ahora viene el numerito del palco, ese palco que diseña el incompetente taurino Ricardo Sánchez, el delegado de la Junta de Andalucía, que como premio a los fallos reiterados de temporadas anteriores de los presidentes, sigue manteniendo a los mismos. El hombre es que está muy ocupado de balcón a palcos cofrades, y ahora de entrega de premios taurinos a burladeros de gañote…. No era viernes, sino domingo, pero desde el palco ordenaron los pañuelos de la suerte para el cuponazo taurino de las dos excesivas orejas para El Juli.
DESDE EL TENDIDO DOS
Pregón y toros
Ignacio Sánchez-Mejías.-
El Domingo de Resurrección es el día taurino por excelencia en Sevilla, el día que comienza la temporada. Por la mañana tenemos el Pregón Taurino que organizan el Ayuntamiento de Sevilla y la Real Maestranza de Caballería. No voy siempre, sólo cuando el pregonero despierta mi interés como este año, que estaba a cargo Santiago Muñoz Machado, director de la Real Academia Española y ganadero de bravo. El pregón ha sido académico, muy lejos de los pregones tipo de Semana Santa. Ha dado un repaso por la historia del toreo en España y de su relación con la Literatura hasta formar parte del lenguaje habitual. Ha nombrado infinidad de frases, términos y palabras taurinas que utilizamos todos en el día a día. En la relación del toro con la literatura ha destacado la aportación de la Generación del 27 y la persona de Ignacio Sánchez Mejías.
Y por la tarde a los toros. La plaza, tan cuidada como siempre; y lleno de ‘No hay billetes’. Pero cumpliendo la tradición: corrida de expectación, corrida de decepción. Sólo el pundonor de El Juli le hizo ‘tocar pelo’, expresión también incorporada al leguaje habitual.
La corrida de Núñez del Cuvillo ha sido un fracaso. Toros con muy poca fuerza, cuando no sosos que no han propiciado una buena tarde. El primero tenía poquísimas fuerzas; Morante estuvo muy torero mientras el toro medio se tenía en pie que fueron tres verónicas y dos series. Un artista sin toro. Su segundo no tenía un pase, literal. Tan literal que ya en varas el público pidió la devolución. Morante le quito las moscas y le arreó un bajonazo en quince segundos. Nos ahorramos un mal rato.
El primero de El Juli tampoco tenía fuerzas y todo se quedó en el intento. El quinto fue el único que tuvo algo de recorrido. Las ganas de agradar, la afición y el poderío de El Juli superaron todas las dificultades. Después de un ‘julipié’ trasero le pidieron las orejas que un presidente dadivoso ni discutió. Excesivo premio en mi criterio. Roca Rey no ha tenido toros de su estilo, pero tampoco él ha tenido su tarde. Con dos toros casi calcados, de escasa fuerza y menos poder, las faenas al unipase de Roca no pueden cuajar. Este torero necesita más toro.
Por cierto, la presentación de MundotoroTV, un absoluto fracaso. Además de no estar disponibles las app para verlas en el televisor, por lo que nos cuentan, la mayoría de los que se han abonado no han podido empezar a ver la corrida hasta el cuarto o quito toro, con suerte. Yo pensaba que esta empresa estaba preparada para el reto asumido, pero que la corrida estrella de la temporada, además su primera retransmisión haya tenido tantos problemas, es una muy desagradable sorpresa. Espero, por el bien de todos, que solucionen todos los inconvenientes antes del próximo festejo.
(www.ignaciosanchezmejias.es)
LA VOZ DE LOS ABONADOS
Gato por liebre
Unión taurina de abonados y aficionados de Sevilla.-
Llega en el calendario la fecha taurina más esperada en Sevilla: Domingo de Resurrección. Se acicala la plaza como las mocitas que buscan pareja. Se ofrece al cliente un espectáculo con las entradas más caras de este país. Todos los años, las supuestas figuras acarteladas este día buscan lo más ‘granado’ del medio toro y estos ingredientes hacen la boca agua a un público ‘agradaor’ que accede a la plaza con muchos saludos y una sonrisa de oreja a oreja. Cuando acaba el festejo, el careto es el de la decepción, tienen la sensación de haber recibido ‘gato por liebre’. Pero la empresa, contenta: el año que viene tendremos más de lo mismo porque la ‘bucheta’ se llena.
Los aficionados que nos negamos a subvencionar espectáculos como el de hoy tenemos la opción de matar el gusanillo con la nueva cadena Mundotoro TV. Bienvenidos a la sala de estar de tantos aficionados. Han mejorado -y bastante- los comentarios de Toros TV y ahora al menos no se tapa la mediocridad de la actual cabaña brava y el relato del festejo merece la pena oírse y no apagar el volumen. Esperemos que tanto Domingo Delgado de la Cámara como Fernando Cepeda no cambien y continúen defendiendo la verdad y pureza de la Fiesta. Otra cosa será cuando lleguen las presiones.
De la corrida, qué decir. Mala presentación. Trapío de plaza de segunda. Presidente de plaza de tercera, regalando la segunda oreja al Juli. Suerte de varas no simulada: simuladisima. Significar que El Juli en el quinto ordena al picador no picar, pues el toro que fue el menos malo de la tarde tuvo más calidad en la embestida. Juli, saca a relucir técnica y dominio de veterano para torear desviado y, en ocasiones, abusando del pico de la muleta; tanto es así que en un cite con el pico es desarmado. No obstante, una faena vulgar, toreo de capote más entonado y una gran estocada no son méritos suficientes para que en una plaza de primera le concedan dos orejas.
Morante y Roca Rey, en el pecado llevan la penitencia. Si se anuncian con el medio toro tienen bastantes posibilidades de que esa embestida borreguil y sin fuerza ni les sirve a ellos ni engatusan a nadie.
GALERÍA GRÁFICA (Pagés)
OTRAS IMÁGENES (Pagés)
