La empresa de la plaza cancela el Domingo de Resurrección, las corridas de la Feria, las novilladas con picadores del abono y el ciclo de promoción de julio debido a la crisis epidemiológica del virus Covid-19. Sólo se abriría la plaza en septiembre si el Ayuntamiento rescata la Feria en la segunda quincena.
Francisco Mateos.-
Tras la cancelación de los actos públicos de la Semana Santa de Sevilla por parte del Ayuntamiento, en consenso con el Consejo de Hermandades y Cofradías, el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, ha dado un nuevo paso debido a la pandemia del virus Covid-19 y ha propuesto aplazar la Feria de Abril al mes de septiembre. Ahora se estudiará el encaje en la segunda quincena de septiembre, coincidiendo con la festividad de San Miguel, por si fuera posible, pero lo que está asegurado es que no habrá Feria de Abril antes del verano. Con la cancelación de la Feria de Abril, la empresa de la plaza de toros se ha visto obligada también a cancelar los festejos taurinos de la Feria de Abril. No habrá toros.
La corrida inaugural de temporada del Domingo de Resurrección, todos los festejos de la Feria de Abril, e incluso las novilladas posteriores a la Feria y el ciclo sin picadores del mes de julio quedan suspendidos. Siguen en pie las dos corridas de San Miguel y la novillada que las precede en septiembre. El empresario, una vez que se conozca de forma oficial si se traslada la Feria de Abril a la última semana de septiembre por parte del Ayuntamiento, podría plantear -como es su intención- un ciclo taurino nuevo, de unas ocho a diez días de corridas de toros, coincidente con la aplazada Feria de Abril septembrina. En caso contrario, Sevilla podría quedarse sin toros durante toda la temporada.
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