La Unión Taurina de Abonados y Aficionados de Sevilla denuncia en un comunicado lo que consideran «actitudes antidemocráticas y fascistas» de la empresa Pagés, al impedir a través de presiones de su personal de vigilancia manifestar educada y pacíficamente críticas en la plaza.
Redacción.-
La Unión Taurina de Abonados y Aficionados de la plaza de toros de Sevilla (UTAA-Sevilla) ha remitido un comunicado a los medios taurinos en el que lamenta que durante la reciente Feria de Abril se hayan producido lo que califican como «represión fascista y antidemocrática en la Maestranza» por parte de la empresa Pagés.
La queja de los representantes de los abonados de Sevilla viene motivada por las dificultades para expresar desde los tendidos reivindicaciones, críticas o incluso respaldos y apoyos a toreros. Así, indican varios ejemplos. «El martes 17 de abril pasó desapercibido para la gran mayoría de espectadores un hecho de una gravedad superlativa. Un esbirro de la empresa Pagés quitó a dos aficionados una bandera de un país sudamericano que entre toro y toro reclamaba justicia y dignidad para la cultura taurina. Denunciamos públicamente este acto represivo propio del fascismo y de una actitud antidemocrática contrario a un derecho fundamental como es la libertad de expresión que recoge nuestra Constitución en el Artículo 20».
Los abonados lamentan que los miembros de seguridad privada de la empresa Pagés coarten a los espectadores que muestran banderas de países de toreros, reivindicaciones como la clásica de ‘Catalunya taurina’ u otro tipo de mensajes reivindicativos. Estos carteles nunca son colgados de forma permanente, sino que se muestran abriéndolos entre varios aficionados en los tendidos entre toro y toro. Sin embargo, los vigilantes de seguridad acuden al tendido para advertir al aficionado que no insista en exhibir bandera o pancarta reivindicativa; incluso con presencia policial. «Este comportamiento de la empresa Pagés es algo que venimos observando habitualmente cuando alguien en la plaza da muestras de defensa de la Fiesta o por alguna cuestión reivindicativa. Hasta la fecha, los aficionados hemos manifestado nuestras opiniones de manera pacífica, en momentos que no se lidia un toro y, sobre todo, respetuosamente».
La Unión de Abonados explica que «el empresario no se ha enterado aún que en este país existe un régimen democrático y que por encima de la Constitución que ampara todos los derechos fundamentales de los españoles no puede imponer ninguna decisión personal y menos cuando sus clientes muestran de forma civilizada, pacífica y respetuosa una defensa de la Fiesta -que tanta falta hace- o que no haya aplicado la rebaja del IVA en el precio de las entradas». Esta última parte del comunicado se refiere a la actuación coordinada de miembros de la Unión Taurina de Abonados, que exhibieron tras un paseíllo una buena cantidad de pañuelos abiertos con la leyenda: «10% IVA», reclamando al empresario Ramón Valencia la devolución de la diferencia del precio de las entradas tras la entrada en vigor de la rebaja del IVA en los festejos taurinos peri mantener los precios de las entradas en niveles similares al año anterior.