Desde hace varias semanas, una cuadrilla de operarios someten a la plaza de toros de Sevilla a su tradicional remozamiento y puesta a punto para que reluzca esplendorosa ante el inminente comienzo de temporada. Se renuevan tablones, se limpian ventanas y arcos, y se pinta fachada y puertas con esmero y mimo.
Francisco Mateos.-
Como cada año, en las semanas previas al comienzo de la temporada la plaza de toros de Sevilla se somete a un remozamiento. La Real Maestranza de Caballería, si por algo se caracteriza en positivo, es por mimar hasta el más mínimo detalle la corona de su patrimonio: la plaza de toros de Sevilla. Desde hace varias semanas, una cuadrilla de operarios trabajan dentro y fuera de la plaza para reparar pequeños trabajos de albañilería, reponer tablas desgastadas, limpiar ventanas y arcos, y pintar la fachada y puertas de la plaza. Un trabajo minucioso que se hace sin prisa, para que todo quede como nuevo para un nuevo estreno de temporada el próximo Domingo de Resurrección.
GALERÍA GRÁFICA (Javier Martínez) |
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