La Junta de Andalucía sigue dando muestra de su total falta de interés y autoridad por la Fiesta de los toros en los dos últimos años. Ni el consejero de Gobernación, Francisco Menacho; ni el director general de Espectáculos, Luis Partida; ni la nefasta delegada en Sevilla, Carmen Tovar, han convocado una mínima ruedac de prensa para analizar la temporada 2011.
Francisco Mateos.-
La Junta de Andalucía sigue deambulando en materia taurina, con el rumbo perdido. Desde hace dos temporadas, una vez que de los puestos con responsabilidades taurinas de la Administración andaluza salieron políticos del PSOE con verdadera afición taurina y sentido de la responsabilidad para con la Fiesta y su entronque social, cultural y hasta económico con la sociedad andaluza, la Junta de Andalucía apenas presta atención a la situación de la Fiesta, y se limita a adoptar la ‘ley del minimo esfuerzo’, de forma que no existe autoridad ni dirección fijada sobre el mundo de los toros en Andalucía.
Ha pasado toda una temporada, la de 2011, sin que ningún responsable taurino actual de la Junta de Adalucía -el consejero de Gobernación de la Junta, Francisco Menacho; el director general de Espectáculos, Luis Partida; o la nefasta delegada en Sevilla, Carmen Tovar– hayan convocado una mínima rueda de prensa para analizar la marcha de la pasada temporada y extraer conclusioones y propuestas de mejoras. Nada. Es más, a fecha de hoy, tres meses después del cierre de la campaña 2011, no existen aún ni datos estadísticos sobre cómo fue la temporada 2011 y su comparativa respecto a las temporadas anteriores.
Al margen de asuntos en los que se ha demostrado que los responsables taurinos actuales de la Junta de Andalucía están más preocupados del ocultimo, de la nula defensa de los derechos de los aficionados, de la manga ancha respecto a abusos de ciertos sectores de la profesión taurina, de aprovecharse de su posición en beneficio de amiguetes o familiares, y hasta ser capaz de ‘arreglar’ con los empresarios una Orden para mantener ‘vetados’ a los periodistas que resultan ‘molestos’ a los gestores de las plazas, nada en positivo se puede extraer de la gestión de la Junta de Andalucía en estas dos últimas temporadas, que suponen una marcha acelerada hacia atrás sobre lo bueno logrado por anteriores compañeros socialistas que se preocuparon y dieron su sitio a la Fiesta de los toros. Todo indica que el periodo de ‘eventualidad’ que se vive en la Junta de Andalucía a la espera de las elecciones autonómicas de marzo no van a favorecer un cambio en el nulo interés por la Fiesta, sino más bien todo lo contrario. Concretamente en Sevilla se cumplen más de dos años sin que la responsable administrativa de la Fiesta en esta provincia, Carmen Tovar, no haya sido capaz de dar la cara ni una sola vez a los periodistas taurinos en una rueda de prensa, por miedo a ser decubierta en sus varios abusos cometidos, lo que con el tiempo le ha terminado por ganarse las duras críticas practicamente unánimes de prensa especializada, abonados y aficionados.
