«…¿Se imaginan a la empresa de la Maestranza organizando unas jornadas con la intención de escuchar a los aficionados, analizar la temporada, el juego de los toros, la presentación de los mismos y estar dispuesta a valorar posibles medidas correctoras que propongan los aficionados para la temporada 2012?…»
Francisco Mateos.-
La empresa Taurodelta, es decir, la familia de empresarios taurinos conocidos como los ‘Choperitas’, que explotan la plaza de toros de Madrid, han organizado para este fin de semana una jornada de reflexión en un conocido y taurino hotel madrileño con el fin de analizar la temporada taurina en Las Ventas desde la perspectiva del toro que ha salido al ruedo venteño, las características específicas de la temporada y extraer conclusiones respecto a la presentación, juego, factor lidia,… El seminario está abierto a medios de comunicación y a todos los aficionados que deseen asistir. La propia empresa ha realizado una buena gestión de comunicación de la convocatoria a todos los medios informativos. Y en primera línea, dando la cara ante los aficionados madrileños de los aciertos o errores, y ofreciendo todo tipo de explicaciones (o disculpas), se va a sentar en la mesa el empresario de Madrid, Manuel Martínez Erice, cabeza visible de Taurodelta. Además de él, toreros y ganaderos que han lidiado, así como veterinarios o presidentes de Las Ventas.
Al margen del desarrollo de la jornada y sus conclusiones, es de alabar que la propia empresa tome la iniciativa, organice unas jornadas y se presente delante de los aficionados para hablar sobre los aciertos y errores de la temporada, y estar dispuesta a escuchar las críticas de los aficionados en el seminario con la intención de poder introducir posibles medidas correctoras.
¿Se imaginan a la empresa de la Maestranza anunciando a los aficionados a través de los medios de comunicación que van a organizar unas jornadas en un gran salón de un hotel sevillano con la intención de escuchar a los aficionados, analizar la temporada, el juego de los toros, la presentación de los mismos y estar dispuesta a valorar posibles medidas correctoras que propongan los aficionados para la temporada 2012? ¿Y que fuera el propio Eduardo Canorea, junto a algún presidente, veterinario y ‘veedores’ de la empresa, el que diera la cara en la mesa de debate para oir con atención a los aficionados? Y para que Canorea esté más ‘cómodo’ admitiríamos incluso que presentase el acto el veterano crítico reconvertido en portavoz semioficial de la empresa.
Inimaginable, ¿verdad? Pues eso: el ejemplo de Madrid.