El alcalde de Sevilla presenta oficialmente la candidatura para la final de la Copa Davis de tenis, que se celebrará en diciembre. Rivalizará con Valencia y Madrid. El alcalde no desvela la ubicación, pero la plaza de la Maestranza parece alejarse por la obligación de disponer de cubierta y el limitado aforo que presenta actualmente.
Redacción.-
Sevilla se sube al tren del tenis mundial y ayer confirmó su petición para albergar la final de la Copa Davis, una cita deportiva internacional que reportará proyección exterior e ingresos. El alcalde, Juan Ignacio Zoido, formalizó ayer oficialmente la candidatura sevillana y rivalizará ahora con otras capitales que se postulan, como son Madrid y Valencia, según informa Diario de Sevilla.
Uno de los escollos que Sevilla debe salvar es el recinto. Sevilla podría contar con el Estadio de la Cartuja, donde se celebró la eliminatoria de 2004, pero hay quien baraja como opción convertir en pista de tenis la plaza de la Maestranza. Esta alternativa presenta problemas técnicos, que habría que resolver; entre ellos, contar con una cubierta, cosa que exige la ITF (Federación Internacional de Tenis), puesto que la final se disputará en diciembre, con unas posibilidades de lluvia elevadas. El aforo del coso cuenta con poco más de 12.300 asientos, frente a los 26.600 que hubo en la Cartuja, el mayor aforo en la historia del tenis.
No obstante, a este problema se suma otro, la polémica podría surgir a la hora de utilizar la Maestranza para un evento de este tipo, algo que nunca se ha llevado a cabo. De hecho, las reformas en la plaza han sido muy discutidas y, aunque hay algún proyecto a título particular de arquitectos sevillanos para cubrir el ruedo, esto nunca se planteó. Una posibilidad que, no obstante, promocionaría la imagen de Sevilla como ciudad monumental y destino turístico, pero que no parece ser la opción más idónea ni ha sido negociada aún con la Real Maestranza. Fuentes municipales barajan otras ubicaciones, pero todas requerirán de una mínima adaptación.
Todos estos obstáculos se salvarían con un pabellón multiusos de unas 15.000 plazas, al estilo de la Caja Mágica de Madrid, una buena alternativa para el tenis, o plazas de toros cubiertas como la de Vista Alegre, también en Madrid, o las de La Coruña o San Sebastián.
