El torero de La Algaba, que actualmente compagina su preparación con su dedicación como director artístico de la Escuela de Tuaromaquia de La Algaba, ha alcanzado un acuerdo con el taurino Antonio Picamills. Manuel Carbonell confía en relanzar su carrera y aspirar a confirmar en Madrid y presentarse en Sevilla como matador.
Carlos Moya.-
El diestro algabeño Manuel Carbonell ha llegado a un acuerdo en los últimos días con el taurino Antonio Picamills para que apodere al torero sevillano de aquí en adelante, según ha adelantado el propio torero a SEVILLA TAURINA. El nuevo apoderado ha llevado a matadores como Juan José Padilla o al sevillano Luis de Pauloba. Carbonell, que tomó la alternativa en 2005, es actualmente director de la Escuela Taurina de La Algaba, un cargo que volvió a ocupar el pasado mes de marzo tras ser cesado en noviembre por el Ayuntamiento local. Finalmente, el conflicto laboral se solucionó, también con la ayuda de la presión social ejercida por el pueblo sobre el grupo socialista, que actualmente gobierna la localidad.
Ahora, además de dirigir la Escuela, el diestro encara con ilusión una nueva etapa de su vida profesional como matador de toros de la mano de Picamills, con la idea de reconducir su carrera taurina y repuntar el bagaje recorrido desde que se doctoró; una veintena de festejos entre España y América. «De momento, mi nuevo apoderado me ha buscado un festival donde torearé mañana sábado –Caminomorisco (Cáceres)–. Será mi segunda actuación en esta temporada tras estar en Talavera de la Reina en marzo. Nuestra idea es comenzar pronto la temporada que viene, estando en las primeras ferias del año, y a partir de ahí conformar una buena base de festejos para estar lo más arriba en el escalafón, y que puedan contar conmigo para Madrid, donde quiero confirmar, o incluso para Sevilla».
Respecto a su presentación como matador de toros en el coso sevillano, la idea de Carbonell es la de «contar para la empresa de cara al cartel de la corrida de la Virgen de los Reyes del año que viene. Soy de Sevilla y lo que más ilusión le hace a uno es que cuenten con él para torear en su plaza». Eso sí, «hay que ser realistas y ser conscientes de que no me van a meter en una corrida de la Feria de Abril, en una de Juan Pedro… En ese caso miro hacia los festejos que hay en preferia, y en una corrida de un hierro duro –Conde de la Maza– con los que suelo torear», comenta el torero de La Algaba.