Un hombre bueno que no merece este trato

Francisco Mateos.-

     Ruperto de los Reyes es callado; muy callado. Discreto; muy discreto. Son de esos toreros a la vieja usanza; están sin hacerse notar. Su salida del palco presidencial de mala forma es un nuevo revés a la idiosincracia de la Real Maestranza, que siempre ha sido agradecida a aquellos que la han respetado y han colaborado a su seriedad. Alguien se ha encargado que ni Juan Murillo ni Ruperto de los Reyes se lleven la merecida ovación de una anunciada despedida en su último festejo. La Delegación de Sevilla tiene que salir a dar la cara y explicar las situaciones que se están produciendo. Nadie ha explicado aún la dimisión de Juan Murillo; sólo existen unas declaraciones del él mismo a este portal donde indicaba que "me voy porque estoy harto". ¿Harto de qué? ¿De los años presidiendo? ¿De las presiones en los corrales?… ¿O harto de los movimientos políticos al frente de la Delegación de la Junta en Sevilla, actualmente dirigida por Carmen Tovar?

     Ahora es Ruperto de los Reyes quien presenta otra dimisión, la tercera del año -junto a Juan Murillo también se fue su delegado gubernativo-. Curiosamente, Ruperto era el asesor de Juan Murillo. ¿Por qué se va Ruperto? ¿Por qué ha declarado a Sevilla Taurina que no se le ha respetado su trayectoria desde la Delegación de la Junta de Andalucía en Sevilla? Parece que la delegada Carmen Tovar aplica la técnica del cansancio: cansar con quien no parece contar para que se vaya aburrido. Lo hizo Juan; y lo hace ahora Ruperto de los Reyes, a quien ha mantenido sin subir al palco (seguía siendo asesor en la teoría) durante estos tres meses, justo desde su última corrida con Murillo, a pesar de que estos días ha debutado un nuevo presidente que no tiene asesor, pero le han colocado a Luis Arenas, que ahora asesora tanto a Gabriel Fernández Rey como al nuevo, Julián Salguero. ¿Es que Ruperto no reunía experiencia suficiente? ¿Es que se duda de su profesionalidad? Además, desde la Delegación, Carmen Tovar no le ha explicado nada. Simplemente lo han mantenido al margen.

     Y es que esa técnica del cansancio parece que es la seguida por la delegada Carmen Tovar. Y lo digo con conocimiento de causa. Desde hace casi un año vengo pidiendo reiteradamente un encuentro con ella a nivel particular para aclarar ciertas cuestiones, y una entrevista para este portal. Se le ha solicitado verbalmente, por escrito en el Registro de la Delegación y por mail. La respuesta es siempre la misma: el silencio. No pasan dos semanas sin que ella en su mail o su secretaria, Rebeca Rull, reciban un nuevo 'recordatorio', y así nueve meses… Verbalmente siempre te responde un "por supuesto" con una sonrisa y bonitas palabras como para darte confianza, pero la realidad demuestra que esa palabra no la cumple. La última vez, hace un mes, cuando la empresa presentó los carteles del recién concluido ciclo de promoción. En el aperitivo posterior -el teniente hermano mayor y el empresario Ramón Valencia de testigos en la conversación, entre otros- le recordé la petición de entrevista. Le dije que cuando tuviera un hueco… "Vale, pues ahora antes del verano, que estoy ya más tranquila…" Se volvió y se lo dijo a su asesora personal. "Recuérdame marcar una cita con Paco Mateos…" Y hasta la fecha. Pero a mí, a diferencia de Juan Murillo y Ruperto de los Reyes, no me va a aburrir con su técnica del cansancio. Sigo enviando correos recordatorios, que por supuesto no contesta ni uno. Todos los tengo guardados, porque recibir los ha recibido.

    Pero, ¿por qué se esconde Carmen Tovar? ¿Por qué no presentó este año a los presidentes antes de comenzar la temporada en rueda de prensa, como es habitual? ¿Por qué no ha salido rápido a explicar la dimisión de un personaje de peso en el palco como es Juan Murillo? ¿Por qué no cuenta a qué se refiere Juan Murillo cuando dice que está harto, si él mismo se lo explicó a ella? ¿Por qué no ha explicado aún lo que denunciaban los abonados sobre el reconocimiento de los toros de Victorino Martín y una posible incompatibilidad ética de un veterinario nombrado por ella? ¿Por qué no va a dar la cara tampoco para explicar la dimisión que hoy cae sobre su mesa del asesor Ruperto de los Reyes? ¿Por qué no explica cómo ha tenido que 'tragar' que el pase de callejón que firmó ella misma a este portal haya sido rechazado por la empresa Pagés, y posteriormente ha fracasado estrepitosamente al intentar imponer su legítima responsabilidad sobre el callejón?… ¿O es que va a esperar a que al fin, como sucederá tarde o temprano, ofrezca las explicaciones Juan Murillo antes que ella?

     Ruperto de los Reyes no se merece esta salida. Él es torero. No está dentro de los intereses políticos-taurinos. Quienes más lo va a sentir van a ser las monjitas del 'comedor benéfico' de la calle Pagés del Corro de Triana, sobre todo Sor María. Los asesores cobran una 'gratificación' de la empresa por cada presidencia de festejo. Ruperto, después de cada Feria de Abril, recogía tranquilamente pasados varios días el cheque total -hay asesores que lo liquidan cada día de festejo- y se dirigía de inmediato dando un paseo al otro lado del río, cruzando toreramente el Puente de Triana. Así lo hizo, un año más, acabada la pasada Feria de Abril, con su cheque de 650,05€. Cuando abría la puerta del 'comedor benéfico' le recibía entusiasmada Sor María, responsable de este comedor para los pobres, y a la que ahora han trasladado a Jerez. Sor María le agarraba del brazo y le enseñaba ilusionada las novedades del comedor. Ruperto, con una amplia sonrisa, le entregaba el cheque y le decía a Sor María: "Tome hermana: para que usted lo administre como bien sabe. Para ellos; yo no lo necesito". Ahora, ya no habrá más paseos toreros hacia el 'comedor benéfico' de Triana.

*Francisco Mateos es periodista taurino sevillano, redactor de Sevilla Taurina y colaborador en otros medios.