Estado actual de las eternas obras de la nueva plaza de Utrera.
FOTO: Sevilla Taurina. |
Javier Sosa Núñez.-
Queridos Reyes Magos:
Me dirijo a Sus Majestades de Oriente para confiarles mis deseos para el próximo año. Tal vez no he sido todo lo bueno que desearía, aunque estoy costando mucho dinero y hablan mucho de mí. Este año he avanzado muy poquito en mi desarrollo: sigo siendo una estructura en un solar de mi barrio de La Mulata, rodeado de jaramagos y basura.
Mis amigos de otros pueblos se han convertido en ejes de la vida social y cultural, y sus vecinos les visitan los días de fiesta; me cuentan que los de feria son los mejores: reciben la visita de foráneos e incluso les hacen fotos para los periódicos.
Sin embargo, aquí en Utrera las cosas funcionan de distinta manera. Les pido para que algún día pueda disfrutar de lo mismo, y para ello me podrían traer el equipo completo de bricomanía, albañiles, maquinaria y materiales de construcción. A ser posible también maderas y pinturas de color rojo, no vaya ser que se les ocurra a los dueños del cortijo inaugurarme medio acabada… No quiero ser envidioso, pero me cuesta librarme de las comparaciones con mi antecesor el elegante señor Coso del Arrecife, cuyo sabor y solera todavía reluce en el recuerdo de muchos utreranos.
Si me traen esto el año que viene me esforzaré mucho, dando mano de obra para salir de la crisis. Prometo llevarme bien con la gente de mi barrio y no ofender a nadie. También me gustaría pedirles por los chicos que me visitan por la tardes; ellos sueñan ser grandes toreros practicando en mi interior y yo sueño al verles a ellos con una pronta inauguración. Podríais traerle una escuela taurina, pues la anterior, muy vieja, desapareció. Aquí hay escuelas de todo tipo, pero en ninguna pueden crecer y aprender el oficio que tanta fama ha dado a Utrera; ellos están un poco olvidados como yo.
Se me olvidaba: me gustaría que me trajeran un luminoso bien grande para poner un nombre adecuado a mi categoría y a lo que soy, para que se enteren de una vez por todas aquellos hipócritas que no paran de insultarme, a llamar las cosas por su nombre.
Espero que este año repartáis muchos caramelos e ilusión por las calles de Utrera, y a ver si algún caramelazo despierta la conciencia de aquellos que juegan con sus promesas al despiste.
*Javier Sosa Núñez es redactor taurino de la revista 'Vía Marciala' de Utrera (Sevilla).
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