La Princesa de Asturias, tras recibir de manos del Príncipe de Asturias, Felipe de Borbón, el Lazo de Dama de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, pronuncia ante la Junta de Gobierno maestrante un emotivo discurso en el que resalta la lealtad de la Maestranza a la Corona y el cariño y afecto que profesaba la condesa de Barcelona a la Maestranza, Sevilla y sus tradiciones.
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Redacción.- La princesa Letizia Ortiz, tras recibir la distinción de Lazo de Dama de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, ha pronunciado ante la Junta de Gobierno de la Maestranza un sincero y emotivo discurso que SEVILLA TAURINA reproduce en su integridad: ¡Gracias! Gracias a su alteza real el Príncipe de Asturias por haber querido venir a Sevilla para imponerme el Lazo de Dama de la Real Maestranza. Gracias al teniente de hermano mayor por sus palabras tan amables. Y muchas gracias a su Junta de Gobierno y a todos los caballeros maestrantes que me recibís hoy como Dama de esta Real Corporación, por vuestra bienvenida y por vuestro afecto. Es cierto, como dice el teniente de hermano mayor, que conocía la Real Maestranza, que sabía ya de su dedicación a la ayuda social, de su permanente disposición a aliviar las necesidades de los sevillanos a través, por ejemplo, de iniciativas como las cocinas económicas de Nuestra Señora del Rosario y de otras muchas acciones solidarias, tantas, que no podrían nombrarlas todas ahora. También sabía de su decidida implicación con cuantas actividades culturales se orientan al fomento de la educación y de la investigación, así como a la difusión de la cultura en todos sus campos, siempre con la intención de incluir en esta labor de mecenazgo un claro componente de excelencia. Excelencia que se encuentra en las convocatorias anuales de los premios universitarios y taurinos, en los premios de investigación o en los pintores de prestigio recocido que firman el cartel de la Feria, que incrementa cada año los importantes fondos del Museo Taurino. Por cierto, hoy se inaugura una nueva sala. En definitiva, todas estas actividades ayudan también a conservar lo mejor de nuestras tradiciones, de esta ciudad preciosa que es Sevilla. Pero por lo que más conozco a la Real Maestranza de Caballería de Sevilla es por su permanente ejemplo de lealtad y por su entrega al servicio a España a través del servicio a la Corona. Esta lealtad, que ha recibido el reconocimiento expreso de su alteza real el conde de Barcelona y de su majestad el Rey, nuestro augusto hermano mayor, tuvo también su reflejo en esa especial relación que la condesa de Barcelona, María de las Mercedes, mantuvo con este Real Cuerpo, que correspondió a su afecto con un cariño sincero que se podía palpar cada vez que asistía, desde el Palco Real, a algún festejo taurino y que ha quedado manifestado, para siempre, en la estatua ecuestre que preside la entrada principal a esta Casa. Podréis entender, entonces, que me sintiera muy honrada cuando recibí esta distinción y que hoy me sienta, además de agradecida, orgullosa de pertenecer a esta Real Corporación, que es un modelo para todos de entrega y de servicio. Muchas gracias. (Sevilla, 21 de noviembre de 2008) NOTICIAS RELACIONADAS:
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